La vuelta a la normalidad de los centros de salud afectados por la DANA se retrasa

El personal del centro de salud de Alaquas, que abrió el 19 de noviembre, sigue sin tener ropa de abrigo impermeable proporcionada por la Dirección, siguen
llevando sus camisetas térmicas y forro polar. El grupo electrógeno sigue sin estar en marcha y, por tanto, siguen sin calefacción y sin ascensor. La humedad en el hall, box urgencias y box clínica está por encima del 50%. El mobiliario que están usando está limpio por encima, pero no afondo, prueba de ello son las sillas que están utilizando para extracciones, las manchas son porque se llenaron de barro y se mojaron.

La primera fase de la obra que era la parte de urgencias, clínica y sala de Extracciones. Se está llevando material para la obra y lo están amontonando en la zona de pediatría que está habilitada, aunque no acondicionada para hacer extracciones, curas, inyectables, urgencias.

En el centro de salud de Paiporta no han podido realizar analíticas por no tener una impresora.

En el centro de salud de Godelleta siguen con los problemas de humedades desde las filtraciones que hubo tras la DANA, el problema radica en que al ser un consultorio auxiliar depende del ayuntamiento y aunque han pintado encima del moho y aseguran haber puesto antifúngicos las manchas a los días vuelven a salir. Desde el servicio de prevención se asegura que trabajando con mascarillas FPP2 y con ventilación es seguro trabajar, pero ni el coordinador de enfermería ni la coordinadora médica están de acuerdo con esto, por lo que han solicitado al servicio de prevención de riesgos que se realice un estudio ambiental para determinar si hay esporas en el ambiente y si realmente es seguro para los trabajadores.

El centro de salud de Aldaya dispone de todo el material y está funcionando ya al 50%.

En el centro de salud de Cheste disponen de todo el material necesario y les han dotado además con un coche para las urgencias y el PAC, hasta ahora se estaban desplazando en taxi.

El centro de salud de Catarroja ha vuelto a abrir, funcionando únicamente la primera y segunda planta. Están bien dotados de EPIs, tanto botas, chaqueta de forro
polar, gafas, bata, buzos, mascarillas... Sigue estando unas dependencias a modo de pequeño consultorio de campaña del Ayuntamiento, que se nutre de voluntarios sanitarios, enfermeras, matronas, médicos, psicólogos no ligados a la Conselleria de Sanidad.

En los centros de salud de Benetúser, Parque Alcosa y La Torre los trabajadores no han recibido botas por parte de Conselleria.

Al centro de salud de La torre ha llegado una nevera para las vacunas homologada como tal, están pendientes de recibir carro de paradas y desfibrilador que perdieron en la riada. El personal que ha hecho jornadas de refuerzo en sus centros de salud afectados, tiene dudas de cómo se les va a contabilizar las horas.

En los centros de salud de Sedavi y Alfafar el personal está recibiendo esta semana las botas de agua cuando no queda barro, un mes después. Hay mucha sobrecarga, que se triplica por norma general, en avisos domiciliarios y agenda atrasada de extracciones pendientes, en condiciones ergonómicas deficientes y donde la seguridad laboral está comprometida.