Tema
Acción sindical
SATSE lucha por las 35 horas semanales
SATSE ha revindicado recientemente que la Conselleria retome con urgencia las negociaciones para implantar las 35 horas semanales de los casi 70.000 trabajadoras y trabajadores de la Sanidad a fecha de 1 de enero de 2025, como aseguró y se comprometió que iba a hacer el conseller de Sanidad, Marciano Gómez.
El conseller Marciano, se comprometió, en los acuerdos de diciembre de 2023, a negociar de nuevo la jornada laboral de 35 horas semanales de lunes a viernes en el turno fijo que firmó la Conselleria de Sanidad en la pasada legislatura con los sindicatos de la Mesa Sectorial y que suponía la implantación gradual desde 2023 hasta 2025, aduciendo que era necesario un acuerdo "real". Este acuerdo, firmado por el Gobierno del Botanic, fue declarado nulo por un informe de la Abogacía de la Generalitat Valenciana al no existir montante presupuestario para llevarlo a cabo.
Tras las reivindicaciones y acciones iniciadas, Marciano se comprometió a negociar esta jornada, comprometiéndose a su implantación el 1 de enero de 2025, aduciendo que será el momento en que la Generalitat cuente con el montante presupuestario necesario para hacer frente a esta modificación de la jornada.
Antes del verano se inició esta negociación en Mesa técnica -junto a la de la modificación del Decreto de Jornada-, negociaciones que aun no se han retomado tras el paréntesis estival. sin embargo, parece ser que el conseller quiere cambiar de criterio en el plazo de esta implantación amparándose en un pacto de legislatura de la Mesa General de Función Pública que establece un plazo máximo hasta 2027 para instaurar la jornada de 35 horas en la Generalitat, pero, de ninguna manera, obliga a llegar a este límite, sino que otorga a cada Conselleria llevar su propia negociación.
SATSE exige a la Conselleria de Sanidad que cumpla con la palabra dada y que establezca la jornada laboral de 35 horas el 1 de enero de 2025 como ya tienen otras comunidades autónomas. De no cumplir el compromiso adquirido, la palabra del conseller Marciano dejará de tener credibilidad para sus trabajadoras y trabajadores.